Una asociación especial genera una residencia regional

 
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Una asociación especial genera una residencia regional

La Redacción de Ensemble en conversación con Gabrielle Molina, Directora Ejecutiva de Project Music; Fundadora de Teaching Artists International, Inc. y Garrett Mendez, Director Artístico de Project Music; Coordinador de Artes Escénicas y Director de Música Instrumental en King School.

06-01-2022

Todos los participantes en la residencia -más de 100 estudiantes de King School, Project Music, OrchKids, Tuned-In del Instituto Peabody, Paterson Music Project, Trenton Music Makers, INTEMPO y RocMusic.

Los estudiantes de música de muchas regiones se reúnen a través de las distancias para pasar días de creación musical intensiva juntos: en todo el mundo, ésta ha sido durante mucho tiempo una de las tradiciones más famosas y valoradas de El Sistema. Durante los dos últimos años de pandemia, esa tradición se ha interrumpido en gran medida.

Pero está empezando a cobrar vida de nuevo. La "Residencia de El Sistema" de la primavera de 2022 en la King School de Stamford, CT, es un ejemplo particularmente vívido. Más de 100 estudiantes de siete programas inspirados por El Sistema en el noreste de Estados Unidos se reunieron con estudiantes de King School con experiencia musical para una amplia variedad de experiencias de creación musical colectiva. Las actividades incluyeron una Muestra Musical, durante la cual cada programa interpretó una o dos piezas; una pieza de Composición Colectiva, "We Are Striving", compuesta virtualmente el año pasado y arreglada para la orquesta completa de la residencia este año; una nueva pieza de Composición Colectiva; un panel de liderazgo estudiantil; y un taller impartido por Monique Van Willingh para artistas docentes, administradores y educadores, centrado en cómo cultivar la agencia y la voz de los estudiantes dentro de las organizaciones y las aulas.

Las raíces de la residencia se encuentran en una creciente relación entre King School, una escuela diurna independiente en Stamford, CT, y Project Music, un programa inspirado en El Sistema en la misma ciudad. Project Music proporciona más de 10.000 horas al año de instrucción musical gratuita a los estudiantes del condado de Fairfield con mayores necesidades económicas, con más de cien estudiantes en cuatro lugares asociados de la comunidad. Los estudiantes comienzan un riguroso proceso de aprendizaje secuencial en el cuarto grado, centrándose en los instrumentos de metal, viento de madera o percusión y participando en una variedad de conjuntos que incluyen la banda de jazz, la banda de metales, los conjuntos de cámara, las secciones y las clases particulares. Dice la directora ejecutiva de Project Music, Gabrielle Molina: "El pasado mes de enero, comenzamos con las cuerdas en uno de nuestros centros asociados, y estamos entusiasmados con el lanzamiento de nuestra primera orquesta en el otoño de 2022, una orquesta reimaginada que incluirá saxofón y guitarra."

Estudiantes ensayando "We Are Striving", con Garrett Mendez dirigiendo. 

King School empezó a acoger residencias de El Sistema hace varios años, gracias en gran parte a la visión de Garrett Mendez, que además de ser el Coordinador de Artes Escénicas de King y Director de Música Instrumental es también el Director Artístico y Cofundador de Project Music. Dice Mendez: "Durante los primeros años del Proyecto Música, algunos de mis estudiantes de la escuela superior de King School venían a ayudar, asistiendo a los ensayos y dando mini-lecciones. Vi las relaciones que se establecían entre los alumnos de King y los de Project Music, y pensé que esto debía hacerse a mayor escala". En la primera residencia participaron una docena de alumnos de Project Music, en su mayoría principiantes que sólo sabían leer un puñado de notas, que se reunieron en el campus de King con alumnos de King más experimentados musicalmente y también con ocho alumnos visitantes de OrchKids en Baltimore, MD. Desde entonces, la residencia ha crecido en alcance y ambición.

"El objetivo general de la residencia", dice Méndez, "es inspirar una conexión más profunda entre las comunidades de diferentes orígenes socioeconómicos, utilizar la música como vehículo para dar voz a diversas identidades culturales y amplificar las experiencias vividas."

Añade Molina: "Vemos que los estudiantes mayores se convierten en líderes y sirven de modelo a sus compañeros más jóvenes. Vemos que esos mismos estudiantes más jóvenes adquieren confianza para compartir sus ideas musicales en la Composición Colectiva. Vemos cómo se hacen amistades en los distintos programas, no sólo entre los estudiantes sino también con los artistas docentes, los administradores y los padres. Es notable ver cómo ha crecido esta residencia, y muchos han expresado que este seminario es el punto culminante del calendario de su programa cada año."

La residencia conlleva una gran cantidad de preparativos. Además de elegir un tema musical general, las tareas logísticas incluyen la comunicación con los programas, la organización del alojamiento y la comida (los gastos de manutención y alojamiento están cubiertos al 100% para los programas participantes), el reclutamiento de voluntarios, la preparación de la música por adelantado y la promoción del evento. Además, las actividades de Composición Colectiva comienzan a través de llamadas de Zoom antes del evento.

Panel de líderes estudiantiles facilitado por Monique Van Willingh (de jersey naranja) y Dan Trahey (extremo izquierdo). 

Sin embargo, Méndez y Molina están de acuerdo en que los resultados merecen todo el esfuerzo. El tema general de este año mostró la voz y la capacidad de acción de los estudiantes, que actuaron y dirigieron la parte del concierto de la comunidad por su cuenta, y desarrollaron una composición de 15 minutos formada enteramente por ideas musicales creadas por los estudiantes. En palabras de Méndez, "fue una demostración de lo que puede ocurrir cuando se invierte el guión en la relación profesor-alumno, de modo que el profesor y el alumno comparten responsabilidades y son más bien colaboradores en pie de igualdad. Esto hace que los alumnos se apropien más del proceso de creación musical, al tiempo que permite a los profesores intervenir y proporcionar tutoría cuando sea necesario."

Por encima de todo, Molina y Méndez destacan el valor de conectar a las comunidades a través de la música. La residencia reúne a estudiantes de toda la región, recordándoles que pertenecen a una comunidad más amplia de estudiantes que también "hacen música todos los días."

"Muchos de nuestros estudiantes, sobre todo los más jóvenes, no se dan cuenta de que forman parte de un movimiento más amplio de jóvenes músicos que participan cada día en programas como Project Music", dice Molina. "La residencia les ayuda a ver que hay gente como ellos que se esfuerza. También tienen la oportunidad de conocer a estudiantes de orígenes muy diferentes y ver cómo comparten intereses y pasiones similares. En última instancia, queremos ofrecer una oportunidad para que todos estos jóvenes se reúnan y se centren en nuestra pasión compartida por la música, independientemente de nuestras diferencias."

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