Justicia social, plan de estudios social en El Sistema Eólico

 
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Justicia social, plan de estudios social en El Sistema Eólico

Clark Bryan, Fundador y Director Artístico/Ejecutivo del Centro de Artes Escénicas Aeolian

03-02-2022

Concierto benéfico de la ELA con el invitado especial y mecenas de honor Yuri Pool. Foto: Jason Plant.

Hoy en día, estamos inundados de palabras como mindfulness, inclusión, liderazgo, inteligencia socio-emocional y empatía. ¿Sabemos realmente lo que significan? Si lo sabemos, ¿somos capaces de ponerlas en práctica? ¿Es una declaración de diversidad una forma auténtica de lograr un cambio positivo en una organización? ¿Decir "empatizo contigo" sirve de auténtico apoyo? Estas son algunas de las preguntas que me he planteado durante más de una década desde que puse en marcha El Sistema Aeolian.

En 2016, tuve la suerte de asistir a la primera conferencia de la Red Internacional de Educación Positiva, donde conocí al Dr. Martin Seligman. Seligman ha propuesto un modelo de bienestar adoptado por la UNESCO en su informe de 2016, "Happy Schools: Un marco para el bienestar de los alumnos en Asia-Pacífico". Este modelo se recuerda fácilmente a través del acrónimo "PERMA": alimentar las emociones positivas, mantener un nivel de compromisocon algo, cultivar relacionespositivas, encontrar el sentido dela vida y experimentar logros. Según Seligman, la investigación ha demostrado que experimentamos una sensación de bienestar cuando cultivamos estas cinco huellas en nuestras prácticas de aprendizaje. Muchas escuelas y programas de todo el mundo utilizan ahora el modelo de Seligman como base de la "Educación Positiva", que antepone el bienestar del alumno a los resultados académicos. No es un fenómeno nuevo, pero me quedó claro que debemos tenerlo en cuenta en los contextos musicales. ¿Cómo podemos mantener la tensión entre la educación social y la musical, uniéndolas en una doble hélice pedagógica?

Mi primer experimento con el Currículo de Educación Positiva fue añadir una columna de "Aprendizaje Social" a la planificación de mis clases. Ya me centraba en los aspectos habituales de la educación musical, como la técnica, la alfabetización musical, la historia de la música y la musicalidad. Es fácil rellenar esas columnas como músicos; estamos entrenados para hacerlo. Mucho más difícil era animar a los profesores a rellenar la columna de aprendizaje social. Me han dicho: "Yo utilizo instintivamente las lecciones sociales en mi plan de estudios todo el tiempo, así que ¿por qué tendría que planificarlas?". Mi respuesta es siempre: "¿Podrías hacerlo mejor en esta área? ¿Podría elaborar un plan de estudios que abordara todas las áreas importantes del desarrollo social para alimentar el bienestar de todos sus alumnos?"

El estudiante Sebastián Torres Prado está listo para una actuación. Foto: John Wiebe.

Con este fin, hace unos años puse en marcha una clase de liderazgo en El Sistema Aeolian, con la esperanza de llevar nuestro Programa de Mentores de Compañeros al siguiente nivel. Los participantes ya tenían experiencia con el modelado en el aula, la enseñanza individual dentro y fuera de la clase, y el liderazgo en la actuación; me pregunté si ofrecer una visión más amplia del liderazgo podría ayudarles a prosperar. En esta clase, empezamos con ejercicios de atención plena y exploramos muchos temas elegidos para ayudarles a reconocer y desarrollar rasgos de carácter. A continuación, cada participante se turna para dirigir el conjunto. Estudiamos los diferentes enfoques que adoptan los participantes para dirigir, centrándonos en el lenguaje corporal y el tono de voz, y luego exploramos sus resultados.

Junto con los ejercicios de música, hablamos de cómo los estudiantes están procesando los problemas actuales, construyendo una atmósfera de confianza y honestidad que se extiende a las otras aulas. Un comentario fascinante que escucho con frecuencia es "nunca conseguimos tener estas conversaciones en ningún otro sitio". La clase es tan impactante que los participantes se entusiasman por ayudar en el funcionamiento y desarrollo de El Sistema Eólico. De este modo, se convierten en cocreadores del programa.

Otra área de interés es la "fluidez social". Defino la fluidez social como la capacidad de relacionarse con confianza con personas de todos los ámbitos de la vida. El Sistema Aeolian funciona como parte de una organización mayor(Aeolian Hall) que ofrece muchos otros programas de educación musical. Gracias a estos programas, puedo invitar a artistas para que actúen e interactúen con los participantes de El Sistema Aeolian regularmente. Nuestros participantes no sólo tienen la oportunidad de actuar con estos artistas, sino que también comienzan a aprender de diferentes maneras. El pasado noviembre, la artista Buffy Sainte-Marie, ganadora de un Oscar y un Grammy, pasó unas horas con nuestra clase de liderazgo, impartiendo una clase magistral sobre la vida y el liderazgo. Buffy figura actualmente en un sello de correos canadiense; en su vida, ha sido una fantástica defensora de muchas cuestiones indígenas, medioambientales y sociales. Sus lecciones proporcionaron a los estudiantes una mayor conciencia de muchos desafíos humanos que nunca habían considerado, e ideas para superarlos. Y, por supuesto, los alumnos también se beneficiaron de su música. Conocer y relacionarse con personas extraordinarias fomenta la autoestima y la fluidez social.

El participante en la clase de liderazgo de la Orquesta Frigia, Leon Gray. Foto: Jason Plant.

Incluso los aspectos más memorísticos de nuestra enseñanza pueden reforzarse con el aprendizaje social, especialmente en el caso de los alumnos más jóvenes. Por ejemplo, las escalas: un profesor puede pedir a su alumno que toque una escala "triste" o "alegre", escuchando las diferencias de tono y tempo y prestando atención al lenguaje corporal del alumno. El uso de colores también puede evocar emociones: "Toca esa escala en rojo". Con el tiempo, se pueden introducir estados emocionales más complejos, como "melancolía" o "serenidad". Defina estos términos; encuentre una pieza musical que demuestre cómo se sienten.

A veces pensamos que el movimiento de El Sistema es de justicia social porque es gratuito y tiene que ver con la comunidad. Eso puede ser cierto, pero no es evidente. Muchas orquestas profesionales han funcionado históricamente como dictaduras. Muchos programas musicales gratuitos centrados en la excelencia pierden a los participantes que necesitan aprender de forma diferente o que no lo consiguen con la suficiente rapidez. En mi opinión y experiencia, si unimos la educación positiva con la educación musical, podemos garantizar la inclusión y la equidad. Podemos ofrecer habilidades transferibles que tengan un profundo impacto en la calidad de vida de nuestros estudiantes. Y podemos dejar un legado de liderazgo, comunidad y acción social.

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