BLUME Haití: Construyendo líderes mediante la educación musical en Haití

 
El Ensemble busca conectar e informar a todas las personas que están comprometidas con la educación musical de conjunto para el empoderamiento de los jóvenes y el cambio social.

BLUME Haití: Construyendo líderes mediante la educación musical en Haití

Rachael Cohen, miembro de la junta directiva de BLUME Haití, Cohorte de Líderes Mundiales 2020

12-02-2019

BLUME Haití utiliza el extraordinario impacto de la música como herramienta para empoderar a los músicos de todo Haití. En respuesta a las necesidades urgentes tras el devastador terremoto que asoló Haití en 2010, la cofundadora Janet Anthony, que lleva enseñando en el país desde 1996, vio la oportunidad de crear una organización que pudiera facilitar el envío de instrumentos y suministros a Haití para ayudar en los esfuerzos de reconstrucción. Así, con la ayuda de sus colegas y estudiantes, nació BLUME Haití.

Avanzando rápidamente hasta 2019, BLUME Haití se ha expandido mucho más allá de la enseñanza en campamentos musicales de verano y el envío de instrumentos al país. En colaboración con socios haitianos e internacionales, apoyamos más de 40 programas musicales ubicados en ocho de los diez departamentos de Haití, que atienden a unos 5.000 niños. Estas asociaciones existen en varios niveles: reforzamos el desarrollo profesional de los profesores haitianos a través de la formación pedagógica, la creación de redes y el apoyo salarial; ofrecemos becas para que los profesores y los estudiantes asistan a los campamentos de verano; y ampliamos el acceso a las oportunidades de desarrollo a corto plazo a nivel local y en el extranjero, para determinados músicos avanzados. Llevamos nuevos recursos a Haití y, sobre todo, ayudamos a que el mayor número posible de escuelas tenga la oportunidad de convertirse en programas musicales estables y con impacto en sus comunidades.

Julio Lubin enseñando a un alumno en la escuela de música Dessaix-Baptiste de Jacmel (Haití).
Fotografía: John M Cahill.

Muchos de los profesores de música voluntarios que trabajan aquí llegaron a Haití porque alguien de nuestra red compartió una oportunidad. Lo que encontramos es un país rico en cultura, donde se celebra la música a todos los niveles, y donde los programas musicales están dando a los niños la oportunidad de prever una gama mucho más amplia de posibilidades para su futuro.

La pasión por la música en la cultura haitiana es contagiosa. No se puede caminar por una calle en Haití sin escuchar música a todo volumen en una radio o pasar por una iglesia sin oír música coral a través de las ventanas. Durante los numerosos campamentos de verano, los estudiantes empiezan a practicar a las 6 de la mañana, antes incluso de que empiece el día, y se quedan mucho tiempo después del último ensayo de la orquesta para dar clases extra o practicar. La música es un vehículo para que los jóvenes de todo Haití se expresen y exploren sus intereses e identidades. Dadas las circunstancias políticas actuales, también puede ser una herramienta que ponga orden en el caos actual de sus vidas cotidianas. BLUME Haití trabaja para apoyar programas exitosos que puedan dar a los estudiantes y a sus comunidades las herramientas para hacerlo.

La primera vez que conocí BLUME Haití fue como profesor voluntario en 2015 en el campamento musical de verano de Sainte Trinité. Hasta 200-300 estudiantes viajan desde todo el país para participar en este programa de tres semanas, uno de los mayores campamentos de música de Haití; hay coro, orquesta completa, banda de viento y orquesta de cuerda, además de clases particulares y en grupo, música de cámara y clases de teoría musical. Los días están repletos! Junto con otros 15 o 20 profesores internacionales ese verano, me pasé el día corriendo entre las actividades, dando clases en cada oportunidad e intentando seguir el ritmo de la energía de cada campista. La música no es sólo una actividad extracurricular para muchos de estos estudiantes; es una parte central de sus identidades. Incluso sus nombres en Facebook suelen incluir el instrumento que tocan. Vi el impacto de estos programas en la vida de cada estudiante, mi corazón se llenó y supe que quería unirme a los esfuerzos de BLUME Haití.

Rachael Cohen trabaja con un estudiante de flauta en el campamento del Anexo AMI en Demizaine.
Crédito de la foto: Rachael Cohen

Una de nuestras iniciativas recientes consiste en una asociación con la Orquesta Sinfónica de Utah para la creación del Instituto de Orquesta de Haití (HOI). En 2017, se celebró el primer HOI en Jacmel: un programa intensivo de orquesta de una semana de duración con miembros de la Sinfónica de Utah, con su director musical Thierry Fischer dirigiendo las secciones, las lecciones, los ensayos de orquesta completa y un concierto final. Un centenar de los músicos de orquesta más destacados de Haití son elegidos por audición para este programa. Como uno de los primeros proyectos de orquestas selectivas en Haití, la HOI es un gran motivador para los jóvenes músicos. Desde los estudiantes más avanzados hasta los de nivel principiante-intermedio, todos quieren participar en la HOI. Los estudiantes practican todo el año sólo para tener la oportunidad de audicionar. Esto es lo más cerca que muchos están de experimentar un nivel tan alto de actuación, y es una oportunidad teóricamente alcanzable para cualquier músico haitiano.

La vida en Haití es difícil en el mejor de los casos, y aún más ahora dadas las luchas políticas actuales. Nuestros amigos, colegas y estudiantes nos dicen que poder ir a su escuela de música para practicar y compartir la música les ayuda a lidiar con los desafíos que enfrentan. Ahora más que nunca, en BLUME Haití fomentamos las escuelas de música que tienen un fuerte impacto en la vida de los jóvenes haitianos. Queremos acompañar a nuestros socios haitianos en la construcción de una comunidad musical más fuerte y más activa en todo el país.

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